Un 15 de julio de 1885 muere Rosalía de Castro en Padrón, Galicia. Tenía 48 años.
Nadie como ella supo llevar al verso y al poema el desgarro del emigrante.
El emigrante no es jamás en los versos de Rosalía el indiano enriquecido sino el pobre y desgraciado que ha sido arrancado a la fuerza de su casa y de su terruño.
El adiós a la tierrina, la morriña y la nostalgia anticipada en los versos de “Adios ríos, adiós fontes” con la voz de Amancio Prada son de una belleza sublime.
(Subtítulos en castellano arriba a la izquierda pero es tan delicioso escucharlo en su lengua gallega que casi no hacen ni falta)
¡Disfrutadlo!